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En la tarde del sábado 27 de abril a las 5:00 pm estuvo en el marco de la Muestra Internacional de Danza Cuerpos en Tránsito "Ballenas, Historias de Gigantes (Danza 3D)", presentado en coproducción internacional, por las compañías Péndulo Cero (México), Larumbe Danza (España), Sneo Danza (España) y Hain Producciones (Chile).
Una obra que tuvo el atractivo de proyectarse con imágenes de fondo en 3D, aplicando las nuevas tecnologías para la danza.
La obra está inspirada en cuentos y leyendas de pueblos originarios de México y Chile. Según en mitos de diversas geografias, con mares, viajes, vida y desiertos, del cual se apreciaron si bien, pecesitos, ballenas, estrellitas, desiertos, etc en graciosa animación. Sobre esas imágenes se desarrollaron las diferentes coreografías, fluidas en movimiento, continuo, con poca virtuosidad, bien ejecutado, con el desacierto de utilizar una música plana y original de Mauricio Corretjé, Luke Abbott/The Album Leaf.
Visualmente la puesta en escena fue muy colorida por las imágenes en 3D, visto por lentes especiales un poco polveados y por el vestuario de colores de los cuatro intérpretes. En ese sentido jugaban con esa ventaja porque al principio sí que se logró un equilibrio escénico en relación con el público. El pero, fue que se excedió esa tranquilidad de la coreografía porque los movimientos siempre fueron los mismos en toda la obra y la música sin mucho sobresalto, salvo algún par de ocasiones que tambien jugaron a pedir aplausos al público, por cierto, un momento que fue bueno, pero no tuvo fuerza porque no se sostuvo para continuar con lo próximo que venía. La parte mejor lograda fue cuando representaron el desierto.
Ballenas, rescata cosas interesantes. En primera porque es una coproducción internacional entre España, México y Chile, y los cuatros integrantes de alguna manera lo manifestaron tal cual. En segunda, fue que además hubo una residencia durante un mes por parte de México en España y eso siempre retroalimenta, labor que se hizo a través de apoyos institucionales y que fue reflejado en escena.
Es así que se tuvo la presencia de Larumbe Danza, dirigida por Juan de Torres y Daniela Merlo, fundada en 1996, representando a España. Péndulo Cero, compañía local dirigida por Miroslava Wilson y Carlos González desde 2007, representando a México. Sneo Mestizaje Projects compañía española que enfoca su trabajo en las artes escénicas, nuevos lenguajes tecnológicos y narrativos, multidisciplinar y transmedia, quienes hicieron los paisajes sonoros, el diseño gráfico y la producción ejecutiva. Y Hain Producciones dirigido por Antonio Altamiranos, compañía que representó a Chile.
El trabajo multimedia fue bueno. Un trabajo creativo que tambien hubiese funcionado perfectamente para el público infantil. De hecho el horario de presentación dio margen para haber encontrado niños como espectadores. Y de hecho así fue.
La coreografía colectiva y la música fue como se insiste plana donde los movimientos dependieron siempre de las imágenes, no hubo un éxtasis en la obra, y si la hubo vuelve y se repite, no hubo fuerza que la sostuviera. Su danza contemporánea fue convencional, que provoca un contraste con el uso de las nuevas tecnologías, sin embargo agradable a los ojos del espectador, sobre todo porque el proyecto fue enfocado a bailar toda la hora, y eso dentro de todo, fue bueno.
Hubo poco uso de los silencios o pocas pausas. Los movimientos fueron evidentemente simulando que se estaba debajo del agua. Siempre ejecutando lo ya obvio que ofrecía las imágenes en 3D, con lentes que ya daba otra perspectiva de la obra, y con pocos cambios de vestuario.
El título de la obra, "Ballenas, Historias de Gigantes (Danza 3D)" ya es bastante sugerente, porque parece título de un documental, o de una película, por lo tanto ya crea una expectativa el título. Que si no se cumple, quiere decir que ha quedado grande. El contenido y el trabajo multimedia tampoco fue mala, fue muy buena, pero deja qué pensar en relación a quién va dirigida la obra ya que figuraba estar en el cine viendo una película de dibujos animados, con intérpretes profesionales haciendo una danza un poco descafeinada.
Aún así el público se quedó contento de ver un trabajo en el que se ha hecho una bonita produccíón, modesta, un poco infantil, ´light´ pero con ganas de hacer danza. Habría que considerar sus más y sus menos. Pero no estuvo mal. En estos tiempos que corren, crear la modalidad de danza en 3D ya es decir por todo lo que encierra, no extrañaría que en un futuro se vean así todas las coreografías como ir al cine, y se convierta en una normalidad.
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